Aquí les tengo algunas cosas que podemos practicar con nuestros hijos y que nos pueden ser muy útiles. Son para las que tienen hijos pequeños, aunque también se pueden aplicar a los mas grandes:

Asegúrese de que lo que usted solicita sea razonable de acuerdo a la edad de su hijo
Blandura es igual a permisividad. NO permita que el niño consiga todo lo que el quiere
Cuando y entonces, son palabras mágicas: "cuando termines de tomar la leche, entonces puedes ir a jugar"
Desapruebe la conducta inadecuada, no al niño. Ej: lejos de decir "niño malo" deberíamos decir: "no muerdas, eso no es correcto"
Encuentre un equilibrio entre lo soportable y la firmeza
Felicitelo por un comportamiento positivo: "me gusta mucho cuando en vez de gritar, me explicas por que estas enojado"
Gritos o golpes actúan con un efecto contrario de lo que usted quiere lograr
Hagale saber las consecuencias de su mal comportamiento, explicándole el por que de la sancion
Indiquele que a usted no le ha gustado lo que ha hecho, pero que de todas maneras lo sigue amando
Jamas lo humille. Trate de entender su respuesta y no la confunda con una falta de respeto
La disciplina es una enseñanza y no un castigo
Mantenga rutinas. Las rutinas fijan hábitos
No olvide ser constante y consecuente frente a limites y sanciones que como padres deben hacer cumplir
Ofrezca advertencias y avisos
Permita la negociación y la flexibilidad para favorecer destrezas sociales en su hijo, ofreciéndole alternativas
Quitar privilegios si continua portándose mal, es la mejor opción
Refuerce los comportamientos positivos
Sea usted mismo un modelo firme de comportamiento
Tolerancia y firmeza son ingredientes básicos de una disciplina adecuada
Use instrucciones positivas con un tono amable: "Por favor, guarda tus juguetes ahora mismo"
Valore las cosas que hace bien

Recuerde: La disciplina no es un castigo, sino mas bien una ayuda para que los ninos aprendan a comportarse de manera adecuada a su edad y a su nivel de desarrollo.

Los niños nunca deben sentirse amenazados ni temerosos, al contrario, debemos educarlos enseñándoles con amor y respeto.


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